sábado, 4 de mayo de 2013

Capitulo 4. Happy World With You.

Narra Diana:

- ¿Sabéis que voy a conocerlos? - Dice con su voz de pito.
Hay veces que me apetece tirarle una piedra en la cabeza.
- Pues que bien por ti. - contesta Lorena cortante.
Chelsea nos mira y se sienta como si el comentario o indirecta de Lorena no existiera y sigue hablando de lo mismo.
- Pues mi padre me ha dicho que seguro que ellos se enamoran de mi, y le he contestado que si se enamoran me quedaría con Harry.
- Eso si el es ciego si, pero si no... - digo susurrando. Lorena estalla a carcajadas.
Al fin suena el timbre, "Bendito sea" pienso.
Nos levantamos y caminamos hacia la puerta, entramos en clase y me siento al lado de Lorena, esta me dedica una sonrisa que yo le devuelvo.
- ¿Que han dicho tus padres sobre lo de independizarnos? - pregunto.
- Dicen que primero quieren ver el piso o la casa.¿ Y tu?
- Igualmente.
- ¿Entonces hoy nos ponemos a buscar?
- Okey.


~~

Salgo de clase.  Lorena y yo hemos quedado para comer y luego buscar un piso con nuestros padres.
En la entrada están ellos.
Caminamos en silencio hacia el restaurante en el que han reservado.
Entramos en el restaurante y comemos tranquilamente mientras hablamos de un tema neutro.
- Bueno chicas, tenemos que deciros algo. - comienza la madre de Lorena.
- Vereis, pensamos que vosotras os portais muy bien en casa, que haceis los deberes y que el curso pasado sacasteis buenas notas, hemos decidido haceros un regalo. - Continua mi madre.
- ¿Y cual es el regalo?
- Luego os lo enseñaremos - dice el padre de Lorena.
- Cuando acabemos de comer.
Lorena y yo nos miramos, sonreímos y acabamos tranquilamente de comer.
~~
Caminamos hacia nuestra sorpresa. Ahora estamos en el barrio más pijo de L.A. las casas son inmensas, dos manzanas más allá, vivo yo, mis padres tienen mucho dinero, y los de Lorena igual.
Paramos delante de una casa con verja negra, es naranja, de dos pisos, la verdad, preciosa.
- ¿Por qué paramos aquí? - Prengunta Lorena.
- Decidimos compraros una casa , para lo de independizarse, sabemos que la queríais comprar vosotras, pero, pensamos que sería mejor que la comprásemos nosotros.
Lorena y yo nos miramos incrédulas. Después chillamos, esta casa está al lado de la playa Santa Mónica.
Nuestros padres nos dan las llaves y entramos corriendo.
Lo primero que vemos es un recibidor precioso.
Allí hay unas escaleras. Seguimos andando y nos encontramos con un salón increíble. Tiene un sofá para 20 personas mínimo. Una mesa preciosa y una televisión de plasma. Y una mesa de diseño con dos sillas al fondo. Luego hay  tres puertas.
 Abrimos lentamente la primera, un baño, pero no un baño normalito, no. Un señor baño. Con un jacuzzi, una sauna, una baño y una ducha de esas buenísimas.



Salimos del baño y entramos en la segunda puerta. Esta es una cocina, una cocina enorme, preciosa.


Sin puertas ni nada también hay un comedor.

Salimos de la cocina y abrimos la tercera puerta. Había una especie de terraza y  esta da al jardín, en este hay una piscina. También es precioso.

La terraza era con suelo de madera.

Salimos de el jardín y subimos las escaleras. En un largo pasillo hay 8 puertas. Abrimos la primera, es una habitación.
Es rosa, toda rosa. También es muy grande.
En ella hay otra puerta, un baño.

Luego dentro de la habitación hay una puerta más. Esta da a una terraza.
Y en ella, también había una escalera desde ella se bajaba hasta la piscina. Entramos de nuevo y vemos un balcón. Desde este se ve la playa Santa Mónica.

- Me pido esta habitación - grito.
- Vale. - Dice Lorena.
Salimos de mi habitación y entramos en la puerta de enfrente.
Es otra habitación, esta es también grande, es muy bonita.
También hay dos puertas y un balcón. Desde su balcón se ve la calle. Una de las puertas es el baño.

Y la otra da a una terraza al igual que la mía. La terraza es igual que la mía. Con los mismos muebles pero en blanco. También tiene una escalera que baja para ir a la piscina.

- Pues yo me quedo esta. - dice Lorena.

Salimos y entramos en la de al lado de la de Lorena.
Un baño. Igual que el de abajo.

Salimos y enfrente otra habitación.
Esta es más normal, una para invitados.
Esta en cambio no tiene terraza ni balcón, solo un baño.
Salimos de esa habitación y entramos en la de al lado.
Era otra habitación. Esta era más señorial.
En este solo había un baño. 

Salimos y entramos en la de enfrente. Era una bastante grande. 

También tenía solo un baño. 
Salimos de esta habitación y entramos en la de al lado. En ella había otro salón. 

Y por último entramos en la puerta de enfrente. Era una terraza. Una gran terraza.
Desde allí se veía la playa.